domingo, 10 de julio de 2011

Apóstoles de la pintura 6

06. Sexto Apóstol
VERMEER
(Delft, 1632 – Delft, 1675)



El río y el lago, superficie y profundidad. Una propuesta de descanso a la mitad del recorrido. La pintura como calma y la calma como posibilidad de revelación. El acercamiento a Vermeer a través de Spinoza. La búsqueda de puntos de contacto. Coincidencias objetivas: mismo año de nacimiento, mismo lugar, mismas circunstancias. Coincidencias subjetivas: el bajo perfil, el gusto por lo pequeño, la pobreza.

Spinoza como metafísico. Dios como gigantesco organismo que contiene al Universo. Las posibilidades humanas dentro de ese esquema sin exterioridad. El problema de la libertad. Permanecer en el Ser: conatus. El mecanismo de las afecciones y las pasiones. Pasiones tristes y pasiones alegres. Spinoza frente a Hobbes. La confianza en el hombre y en la política. La ética de los pequeños gestos y la ausencia de modelos. El Ser como posibilidad.

Vida de Spinoza. El exilio de Portugal. Holanda: en búsqueda de tolerancia. Sefaradíes y ashkenazíes, dos modos de ser judío. El Herem: anatema y excomunión. La conexión con los “cartesianos”, la figura y la protección de Johan de Witt. El pulidor de cristales. Tuberculosis y muerte en la pobreza. Caute. Reflexión sobre la contradicción entre la vida y la obra. La filosofía en contra de la experiencia.

El origen de la pintura holandesa: Jan Van Eyck y El matrimonio Arnolfini. El espejo y la influencia sobre Velázquez. La reforma y el fin de la Iglesia y de la nobleza como demandantes de pintura. El retrato grupal de Frans Hals y la celebración de la sociedad civil. Problemas de composición democrática. El gigante de Holanda: Rembrandt. Algunos apuntes sobre su vida. Las grandes telas grupales. La ronda nocturna y la película de Peter Greenaway.

Vida de Vermeer. El matrimonio, la suegra y el barrio católico. Primeros encargos religiosos. Comerciante de arte y experto en pintura. Los motivos de Vermeer. Mujeres y cartas, ventanas y mapas. Lo que se ve y lo que se sugiere, presencias y ausencias. “La ineluctable modalidad de lo visible” de Joyce. El mundo lejano evocado y el mundo próximo visto. Los pequeños gestos elevados al culto. Objetos que se repiten. Escarceos amorosos y escenas interrumpidas. La teatralidad barroca. Las vistas de Delft. La mirada diáfana de la joven del aro de perla.

Cuestiones técnicas. La pintura de género y la escuela de Delft. La perfección del espacio y la cámara oscura. Espacialidad científica y espacialidad técnica. La perfecta definición del volumen y la maestría del color. Pintar sin dibujar y modelar con la luz. La lentitud del trabajo, solo 35 cuadros. Ruina y muerte. La cuenta del panadero. El soneto de Borges y la poesía como pintura. Spinoza, Vermeer y Borges, un triángulo perfecto.

4 comentarios:

La condesa sangrienta dijo...

¡Qué lujo, Opi!
Un maravilloso recorrido que me apena no poder compartir.
Beso grande y buen lunes!

La herida de Paris dijo...

Gracias Condesa, ahora nos tomamos un receso y retomaremos en la segunda mitad del año los 6"apóstoles" que faltan.

Y a propósito de los pintores holandeses, ayer vi "The Nightwatching" de Peter Greenaway. Muy recomendable para amantes de la pintura de Rembrandt.

Saludos.

Mary poppins dijo...

Hola opi
Te recomiendo una peli: " de dioses y de hombres" , es francesa
Un saludo

La herida de Paris dijo...

Mary gracias, la tengo en lista de espera. Justamente el otro día lei un artículo por casualidad en "Communio" sobre Christian de Chergé sin tener idea de la existencia de la película. En cuanto María termine con los finales de la facultad, la vamos a ver y comentamos.

Saludos.