domingo, 15 de febrero de 2009

Herido por vivir

("Mondo di cromo", Luis Alberto Spinetta)


Empieza
comienza con la luna
y sigue con tu pie.

Regresa
tus huesos se están yendo
sin ver nunca la luz.

En el almizcle de los días
la luz optó por alumbrarte
y a la vez conoció tu amor sin retorno.

Camina
o compra las estrellas
para sobrevivir.

Arriba
tu cuerpo escucha todo
herido por vivir, herido, herido por vivir.

Y ese dulzor evanescente
se irá perdiendo entre tus nombres
te hará pensar
qué solo estás.
Decime dónde, dónde, dónde
puedo darte mi alma... descansa.

En el estío de este mundo
te esperan todas las ventanas
y a la vez volverás al sol sin retorno.




Salmo 56:
“Me refugio a las sombras de tus alas,
mientras pasa la calamidad”.

Refugiarse puede ser una tentación, cuando las nubes aparecen en ese horizonte.
Cuando en el mundo aparece, como en estos días, una voluntad de detención. Sin embargo, esta no puede ser más que una solución transitoria. La vida exige el movimiento y la quietud es un signo inconfundible de muerte. Ponerse en movimiento exige una decisión inicial, frecuentemente la más ardua. A veces todo consiste en empezar.

Este empezar tiene desde el inicio una indicación precisa que es todo un programa. “Empieza por la luna y sigue por tus pies”. Una sana combinación de poesía y realismo, con preeminencia de la primera. La luna impulsa el andar de los pies y a veces eleva su andar por sobre las rispideces del desaliento.


Seguramente pronto vendrán las dudas. La idea de un andar lineal sin contramarchas se revela prontamente un espejismo. Siempre acecha la sospecha de una vida inútil, que sólo se reduzca a la materialidad de unos huesos que se pierden en las sombras. Nuestros huesos. La desesperanza es un enemigo tenaz.

El caminar esforzado puede perderse en distracciones. Encandilado por el vano brillo de las estrellas, podemos torcer el rumbo hacia ese tipo de existencia que Heiddegger llama con precisión “inauténtica”. Un vivir aturdidos para, nada más, sobrevivir.

Existir es un recorrido al que nos impulsa un imperativo. Una fuerza remota nos ordena asumir nuestra existencia. Debemos ponernos en movimiento, a riesgo de perecer. Será, seguro, un andar no exento de riesgos y del que difícilmente salgamos ilesos. La duda, entonces, es morir quietos o quedar heridos en el camino. Heridos por vivir.

Pero hay algo más, que la música señala con notable eficacia. Otra perspectiva aparece entre las breves estrofas imperativas. No todo se reduce al trajinar en el “almizcle de los días”. El existencialismo es siempre un techo demasiado bajo para el hombre. Su esfuerzo se revela siempre desmedido. Es necesario ir más allá de nosotros mismos. Abrir una ventana hacia esa luz que optó por alumbrarte. La luz de quien te ama con un amor que no puede ser devuelto. Dios irrumpe. No te detengas, pero sí descansa. En Él.

El salmista concluye más adelante, una vez abandonado el refugio y tal vez, contemplando sus heridas, canta:



“Mi corazón está firme,
Voy a cantar y a tocar,
Despierta gloria mía,
Despertad, cítara y arpa
despertaré a la aurora”.

9 comentarios:

Angie Angelina dijo...

Sí, igual mi favorito de Spinetta es "Seguir viviendo sin tu amor" .

La herida de Paris dijo...

Si un lindo tema, pero este no está nada mal (track 4 de Mondo di cromo").
De todos modos:
"No me escribas la pared
sólo quiero estar entre tu piel"
Es una gran línea, una denuncia al histeriqueo.
Algún día me voy a ocupar de esa canción.
Saludos

Angie Angelina dijo...

Uh, nunca lo habia pensado así, puede ser.

Anónimo dijo...

(mientras no hables de Boca, Spinetta está bien)

Anónimo dijo...

(mientras no hables de Boca, Spinetta está bien)

Anónimo dijo...

mondo di cromo, que pieza dios, ese energumeno oficinista en la tapa, preludio de yuppie o sindicalista por venir, ese telefono de colores maravilloso, anticelular compacto y ey esos temas tan bellos.
luis es un amigo.
un enorme amigo desconocido que nos acompana como una estrella, como una cosa mas de la casa, que esta ahi sin darnos cuenta, pero irradiando amor.
viva la musica.
viva el sol.
viva eveready!

Angie Angelina dijo...

Che Anónimo hablás de spinetta como si se hubiera muerto, ya lo pusiste en el bronce.
Ok, buen musico, poeta, pero esta vivito y coleando por ahi, che, no lo mates.

La herida de Paris dijo...

Janfi, como sabrás Spinetta es un conspicuo hincha de River. Todo se le perdona a Luis, ese "enorme amigo desconocido", y que ciertamente esta bien vivo, como lo prueba su último disco.
Saludos.

Estrella dijo...

Como siempre, un placer leerte, sobre todo hoy: tus palabras me vienen como anillo al dedo. Copio y pego, los hijos sabrán entender.